Desde Educación aclaran que no existe dependencia laboral entre docentes de institutos privados y el Estado
Así lo manifestó el director de Educación Pública de Gestión Privada del Ministerio de Educación, Juan Ramón Meza.
"Frecuentemente, la relación o vinculo, entre propietario, docentes de educación pública de gestión privada y Estado, es un factor de confusión conceptual", señaló el director de Educación Pública de Gestión Privada, Juan Ramón Meza.
"Es decir, en determinadas oportunidades, es común confundir los roles jurídicos, responsabilidades, derechos y deberes que posee cada uno de los actores de la relación que se establece entre el empleador propietario del establecimiento educativo, el trabajador en estos institutos educacionales y, finalmente, el Estado otorgante de la autorización o incorporación a la enseñanza oficial", explicó.
Al respecto, manifestó que "el error radica generalmente en entender que existe una relación jurídica directa y de dependencia laboral entre el trabajador docente privado y el Estado, siendo que en realidad la relación de dependencia laboral existe exclusivamente entre el trabajador y el empleador privado". "No ocurre una relación de dependencia laboral entre el docente privado y el Estado", afirmó.
Sin embargo, indicó que sí existe una vinculación jurídica entre el propietario de un establecimiento privado incorporado (empleador) y el Estado, quien ejerce sobre aquél facultades de controlador pedagógico, económico, de cumplimiento de las normas de derecho del trabajo, entre otros, como condición para conceder y mantener la autorización de funcionamiento del instituto.
Por lo tanto, remarcó que el propietario del instituto educativo, que puede ser una persona física o ideal (iglesia, asociación, fundación, sociedad civil, u otras) es en definitiva quien a este contrato ocupa el lugar de la empresa o el empleador en los términos genéricos del Régimen de contrato de trabajo o al Estatuto del Docente Privado. "Por cuya causa puede expresarse que el subsidio estatal otorgado a favor de un instituto educacional de carácter privado no cambia la naturaleza contractual de la relación laboral existente entre éste y los profesores que allí se desempeñan, la que sigue siendo reglada en forma general por la Ley de Contrato de Trabajo", expresó.
En conclusión, destacó que debe tenerse presente que los compromisos asumidos por los propietarios o sus apoderados sólo deben obligar a la institución y no al Estado. "Esto implica que el salario lo debe abona siempre el empleador, aún cuando reciba aportes o subsidio estatal a ese efecto. Es decir, los salarios o rubros laborales de cualquier naturaleza que se deban al trabajador los adeuda siempre el empleador y no el Estado", sostuvo.
"Por tanto, no resulta solidamente suficiente a los empleadores escudarse en la eventual falta de pago de subsidio o aporte estatal con destino a sueldos, o demora en este, para incumplir con tal débito, propio del contrato de empleo. Tan solo un motivo o justificación", subrayó para finalizar.
Fuente: D. Chaco
"Frecuentemente, la relación o vinculo, entre propietario, docentes de educación pública de gestión privada y Estado, es un factor de confusión conceptual", señaló el director de Educación Pública de Gestión Privada, Juan Ramón Meza.
"Es decir, en determinadas oportunidades, es común confundir los roles jurídicos, responsabilidades, derechos y deberes que posee cada uno de los actores de la relación que se establece entre el empleador propietario del establecimiento educativo, el trabajador en estos institutos educacionales y, finalmente, el Estado otorgante de la autorización o incorporación a la enseñanza oficial", explicó.
Al respecto, manifestó que "el error radica generalmente en entender que existe una relación jurídica directa y de dependencia laboral entre el trabajador docente privado y el Estado, siendo que en realidad la relación de dependencia laboral existe exclusivamente entre el trabajador y el empleador privado". "No ocurre una relación de dependencia laboral entre el docente privado y el Estado", afirmó.
Sin embargo, indicó que sí existe una vinculación jurídica entre el propietario de un establecimiento privado incorporado (empleador) y el Estado, quien ejerce sobre aquél facultades de controlador pedagógico, económico, de cumplimiento de las normas de derecho del trabajo, entre otros, como condición para conceder y mantener la autorización de funcionamiento del instituto.
Por lo tanto, remarcó que el propietario del instituto educativo, que puede ser una persona física o ideal (iglesia, asociación, fundación, sociedad civil, u otras) es en definitiva quien a este contrato ocupa el lugar de la empresa o el empleador en los términos genéricos del Régimen de contrato de trabajo o al Estatuto del Docente Privado. "Por cuya causa puede expresarse que el subsidio estatal otorgado a favor de un instituto educacional de carácter privado no cambia la naturaleza contractual de la relación laboral existente entre éste y los profesores que allí se desempeñan, la que sigue siendo reglada en forma general por la Ley de Contrato de Trabajo", expresó.
En conclusión, destacó que debe tenerse presente que los compromisos asumidos por los propietarios o sus apoderados sólo deben obligar a la institución y no al Estado. "Esto implica que el salario lo debe abona siempre el empleador, aún cuando reciba aportes o subsidio estatal a ese efecto. Es decir, los salarios o rubros laborales de cualquier naturaleza que se deban al trabajador los adeuda siempre el empleador y no el Estado", sostuvo.
"Por tanto, no resulta solidamente suficiente a los empleadores escudarse en la eventual falta de pago de subsidio o aporte estatal con destino a sueldos, o demora en este, para incumplir con tal débito, propio del contrato de empleo. Tan solo un motivo o justificación", subrayó para finalizar.
Fuente: D. Chaco
Buena aclaratoria.
ResponderBorrar@AnónimoNO VEO LAS HORAS QUE EMPIECEN LAS CLASES. EXTRAÑO A MIS ALUMNITOS. YO VOY A EMPEZAR AUMENTAN O NO. ELLOS NO TIENEN LA CULPA DE QUE HAYA GREMIALISTAS INCOPETENTES!!!! QUE LO UNICO QUE SABEN HACER ES LLEVARTE AL PARO PARA QUE? SI NO HAY RESULTADOS POSITIVOS.
ResponderBorrarAnónimo 2 quiero suponer que ironizás con tus expresiones, porque si todos pensaran como vos, tenemos que dejarnos arrear como animales de tiro, no creo que sea eso lo que debemos enseñarles a los alumnos. A pensar ¿eh? porque el gobierno se hace el poderoso pero ¿por qué no se cumplieron los 180 ó 190 días de clase? los paros han sido el grano que no pudieron rascarse.
ResponderBorrarEl estado Poncio Pilato se lava las manos con los padres estafados por la educación privada. En Chile se esta luchando por la escuela publica, por que se pudrieron de los privados, en estados Unidos funciona gracias a las colonias dóciles que le dan dividendos. Hoy por hoy la Didáctica, la Pedagogía, etc, puesta en buenas manos esta en condiciones de garantizar una educación de excelencia a cualquiera. solo es una cuestion de recursos humanos, los que se forman gracias a recursos financieros, que a su vez se forman vía utilización responsable de los recursos económicos que tiene un país. La educación privada lo que hace es garantizar a un gueto los saberes que por otro lado son públicos, sin importar el destino del resto de los ciudadanos que también deberían ser formados, pasando estos últimos a ser sus potenciales clientes en desigualdad de condiciones de saber, y como tales factibles de ser sujetos a la expropiación de su trabajo,a través de la imposición de salarios mas bajos a la hora de repartir lo que produce una empresa, por ejemplo- La educación desigual, que no es por excelencia sino por no educar a otros, por el simple echo de que son de la escuela publica es en definitiva uno de los tantos crímenes de la época, y son reminiscencias de los anhelos esclavistas de algunos sectores políticos que anhelan estas practicas de las colonias esclavistas.
ResponderBorrarAlgunos se escudan en la filosofía del peor es nada para mandar sus hijos a las escuelas privadas, pero son como el avestruz que ante el peligro esconden la cabeza debajo de la tierra.