La educación en alerta roja

Por: Eduardo López

Dentro de 24 horas, gremios docentes y autoridades del Ministerio de Educación tendrán su segunda reunión del año, encaminada a solucionar la cuestión salarial planteada durante todo el 2014 y nunca resuelta.

 A juzgar por lo dicho tras el encuentro de siete días atrás, podría suceder que hoy se haga un anuncio de mejoras, que con la visión más optimista podría resultar un compás de espera para la necesaria consulta a las bases y, con la más pesimista, una rotura total, rechazando la oferta.
Queda un camino intermedio para seguir las negociaciones, algo que de ser así va a repetir lo de años anteriores, que se llega a la iniciación de clases sin nada solucionado y con amenazas de paros ya desde el comienzo.
Hoy, 26 de enero se está a 30 días del 2 de marzo, día fijado por el calendario escolar para el inicio de las clases del ciclo primario.
Un lapso suficiente para negociar, si existe la buena voluntad entre las partes, pero muy corto si se profundiza el clima de hostilidad y desconfianza que se mantuvo durante todo el ciclo lectivo anterior.
Parece mentira que esto pase justo cuando quien conduce las negociaciones, el ministro de Educación, sea alguien que estuvo de los dos lados del mostrador y conoce desde lo más íntimo la situación de unos y de otros.
De no encontrarse una salida, los ciudadanos tienen derecho a pensar que la mentada “prioridad a la educación” es un simple verso, uno más, con el que los gobiernos embaucan a la población. No puede pensarse en mala voluntad de ninguno de los dos lados.
Preferimos creer que tanto gobierno como docentes obedecen a una vocación de servicio en un tema que no tiene parangón. Se trata de sentar las bases de la educación en las generaciones venideras. Algo que parece también otro verso, pero que no es así.

Balance parcial

Al finalizar el ciclo pasado, el ministro dijo estas sentidas palabras: “Culminamos el ciclo lectivo 2014, que tuvo a la comunidad educativa como protagonista en todos los sentidos, que estuvo marcado por el logro colectivo, por la participación, el esfuerzo, la dedicación al estudio; y todo lo que significa estudiar y aprender con alegría, para la democracia, para la paz, la justicia y convivencia de todos y todas los chaqueños”, algo que dice todo y que no dice nada según se lo lea e interprete.
Enumeró obras de infraestructura -lo que está muy bien- y muchos proyectos para el presente. Sobre el tema salarial también tuvo conceptos parecidos: “la masa salarial aumentó a 376 millones de pesos mensuales”, dijo, “debemos tener una cuota de responsabilidad y seriedad” y aclaró que este gobierno no va a prometer lo que luego no va a poder cumplir. Algo que puede estar dando una pauta que lo que pasará mañana sobre las expectativas gremiales que pretenden una mejora que contemple la pérdida del valor adquisitivo del 2014 y un porcentaje superior al de la inflación prevista más la devolución de los descuentos del año pasado.
Las autoridades educativas fueron muy optimistas en su balance, resaltando lo que consideraron logros, pero nada dijeron de que fue uno de los años escolares con menos días de clase efectivos, porque se compatibilizaron 60 días de paros de los principales gremios, es decir más de dos meses completos del calendario escolar.
Se puede argumentar que no todos los docentes están de acuerdo con las medidas de fuerza, lo que es cierto, pero no se puede ignorar que éstas siembran el desconcierto y aumentan la pereza y dejadez de los alumnos para los que la escuela se ha tornado un lugar anárquico en la que unos tienen clases y otros no, según los maestros y profesores que les toquen en suerte y que, en medio de ese clima, es difícil, por no decir imposible, plasmar el acto educativo que es mucho más que transmitir conocimientos.

Con los números a la vista

El cada vez más fuerte enfrentamiento entre los conductores de los gremios y las autoridades provinciales hizo que se terminara el año con amenazas de no comienzo del ciclo 2015. Resulta loco pensar que no se puedan sentar a una mesa de diálogo docentes convertidos en sindicalistas —pero docentes al fin— y autoridades (encabezadas por un ministro docente y gremialista) y que poniendo todos los números y los objetivos al descubierto llegar a un acuerdo que contemple la tan cacareada prioridad educativa, la necesitad económica de los que imparten la docencia, pero por sobre todo el cumplimiento del derecho a la educación que tienen niños, adolescentes y jóvenes, ahora desde los cuatro años. Si se ha abrazado esta tarea, hay un deber insoslayable que no puede dejar de cumplirse.
No es lo mismo de una obra material que, si se atrasa, aparentemente no pasa nada. Lo que no se recibe a tiempo en el proceso educativo dejará huellas profundas en la generación que hoy se está formando en las aulas. Ni el gobierno, ni los gremios docentes pueden ir a la negociación con posturas rígidas. No es algo optativo, tienen la obligación de encontrar un camino de encuentro que no repita lo del 2014, que se dictaron efectivamente el 60 por ciento de los días de clases y en medio de conflictos.
Los treinta días que nos separan del inicio de las clases del nivel primario marcan un alerta roja para la educación, que volverá a perder si no se toman las cosas en serio, con responsabilidad y con sentido común. Nos gustaría escuchar tanto de las autoridades, como de los gremios y de los pretendidos candidatos a gobernador algo más que obviedades relacionadas con la solución a esta situación que busca una marcha no traumática del año escolar. Más allá de las bienvenidas obras de infraestructura.


Fuente:  D. Norte


Comentarios

  1. QUÉ TRISTE PAPEL LE TOCO DESARROLLAR EN LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN DEL CHACO A ESTE PERSONAJE DE CARTÓN PRENSADO

    LO RECORDAREMOS COMO AQUEL QUE HABIENDO ENARBOLADO LAS BANDERAS DE LOS DERECHOS DOCENTES, Y HABIENDO LLEGADO AL LUGAR PARA PODER CUMPLIRLOS, PREFIRIÓ LAMER LAS SUELAS DE LAS BOTAS DE UNA BABOSA QUE ESTA COMO GOBERNADOR A CARGO

    ResponderBorrar
  2. Me es indiferente que el científico occidental típico me comprenda o me valore, ya que no comprende el espíritu con el que escribo. Nuestra civilización se caracteriza por la palabra 'progreso'. El progreso es su forma, no una de sus cualidades, el progresar. Es típicamente constructiva. Su actividad estriba en construir un producto cada vez más complicado. Y aun la claridad está al servicio de este fin; no es un fin en sí. Para mí, por el contrario, la claridad, la transparencia, es un fin en sí.
    Aforismos. Cultura y valor, 30.

    Quien escribió esto ?

    ResponderBorrar

Publicar un comentario



Lo más leído de la semana

Vouchers educativos: conocé cómo acceder al programa nacional

Entrevista a Eduardo Mijno: Resultados de encuesta, liquidación de haberes, licencias médicas e incentivo. Audio.

FEDERACIÓN SITECH EXPRESA DISCONFORMIDAD CON RELACIÓN A LIQUIDACIÓN DE HABERES Y SOBRE LICENCIAS MEDICAS

Arranca el cronograma de pagos en la administración pública provincial

El Cronograma de haberes de la administración pública inicia el martes 26 de marzo